La Hermandad de la Vera Cruz, después de la apertura solemne que se vivió con la presencia del Cardenal Amigo Vallejo el pasado día 26 de enero, vuelve con nuevos actos de aniversario por la celebración del 475 aniversario de los orígenes de esta Hermandad. La devoción profesada a las Llagas o Sangre de Cristo por veinte hermanos de la V.O.T., tutelada espiritualmente por los frailes franciscanos que se asentaron en la entonces aldea de Linares, probablemente desde 1534, sirven de motivación para convertir este año, en una celebración especial. Con este carácter extraordinario y por haberlo acordado así la Junta de Gobierno celebrará, de forma extraordinaria un, SOLEMNE VIACRUCIS, en la tarde noche del viernes 20 de marzo.
El motivo no es otro que rememorar, los viacrucis que al menos desde el año 1545, impulsaron los franciscanos, siguiendo las enseñanzas de San Francisco, lo que permitió impulsar la devoción a la Cruz de Cristo, haciendo del ejercicio del viacrucis, una manifestación pública de fe de gran impacto entre la población local del siglo XVI. La aldea de Linares hizo suya esta devoción a la Sangre o Llagas de Cristo, junto al ejercicio público del viacrucis de disciplinantes durante la noche del Jueves Santo, visitando cinco lugares sagrados, en recuerdo de las cinco llagas de Cristo.
Para evocar tan singular efeméride es propósito de la Hermandad y de su director espiritual aprovechar de forma extraordinaria, la oportunidad de recuperar esa celebración en su recorrido originario, partiendo desde San Francisco a las 18.30 horas y finalizando en la Cruz del humilladero, que se erigió el año pasado en los Jardines de la Estación de Madrid. En la necesidad de rememorar los viacrucis que dieron lugar a las manifestaciones públicas de la pasión en Linares, era especialmente significativo poder contar con un franciscano, predicando junto en este viacrucis, 475 años después y evocando nuestros origines. Finalmente la Hermandad de la Vera Cruz contará con Fray Juan Carlos Moya Ovejero, Ministro Provincial de la Orden Franciscana en España, y lo harán con el crucificado de la Sangre, imagen incorporada a dicha hermandad.