Con la llegada del verano los vecinos encuentran en las terrazas de los bares un oasis para escapar de las altas temperaturas en una ciudad que no tiene playa. Hasta ahí todo bien. Sin embargo, la proporción de mesas que se instalan en los acerados no es comprendida por muchos otros residentes de aquellas zonas donde la superficie que ocupan es considerable.
Esto ocurre en el barrio de San José y, en concreto, en la famosa Plaza Aníbal e Himilce. Alrededor de la estatua del minero, hay establecimientos que, aunque durante casi todo el año ponen mesas en la puerta, éstas se multiplican en estos meses por la demanda de clientes.
«Un día sí, y el otro también, recibimos las quejas de los vecinos porque las mesas ocupan casi toda la acera y para transitar por allí, hay que ir haciendo eses», declara el presidente del colectivo vecinal de San José, Juan Gil.
Lo que piden desde la asociación es que los establecimientos cumplan la normativa y que respeten los límites a la hora de poner las mesas. Ésta queja, que no es nueva, se la han hecho llegar a la Federación Himilce y, el pasado jueves, hablaron el concejal de Seguridad Ciudadana, Luis Moya, para volver a pedirles que solucionen el problema. Le reiteraron que es necesario que desde el Ayuntamiento de Linares pinten los sectores de las terrazas en donde esté permitido poner veladores, que se obligue a exhibir el permiso que tienen para la instalación de mesas y que velen porque se cumpla la ordenanza municipal.
«Nos dijo que mandaría a la Policía Local para que levantara acta, pero llevamos ya muchos meses reclamando esto y estamos cansados. El Ayuntamiento es el que tiene que hacer que se cumpla la normativa. Mientras tanto, confiesan desde el colectivo vecinal que intentan tranquilizar a los vecinos puesto, según ellos, es notable que en algunas zonas el paso por esta plaza se convierte en una carrera de obstáculos por la presencia de mesas.
Destacan, a su vez, que la ubicación de las mesas impide la llegada de los vecinos a los pasos de peatones que hay alrededor de la Plaza, un motivo de enfado más para los residentes de San José.
Otro de los puntos que señalan es la limpieza la Plaza como consecuencia de la actividad de los bares. «En las ordenanzas dice que tiene que haber papeleras para depositar lo que se genera aquí, pero no hay. También vemos cómo los acerados no están del todo limpios por los bares que allí hay. Eso no pasa en otras ciudades que también tienen terrazas», afirma el presidente.
También hacen una distinción en lo que en esta plaza ocurre y en otras zonas del barrio. En este sentido, consideran que desde el Ayuntamiento se es más permisivo con los establecimientos que hay allí, y no tanto con otros «en donde si sacan una mesa más, los multan», dicen.
En definitiva, expresan su deseo de poder volver a tener una plaza como la que aseguran les costó mucho trabajo conseguir. «Ahora se ha convertido en un botellón legalizado», subraya Gil. Jéssica Soto. IDEAL.