El Paseo de Linarejos en primavera
«Con una longitud de unos 500 m y 30 m de largo, sigue el concepto de bulevar parisino con una calle central y dos calles laterales más estrechas.
Comienza en la fuente de la Constitución de principio de los años 80 y acaba en la glorieta de América con otra fuente dedicada a nuestro guitarrista internacional don Andrés Segovia de 1985; tanto al principio como al final hay dos farolas que enmarcan la calle central, son de hierro fundido, de estilo modernista, hechas en Sevilla en 1881.
A lo largo de la calle central hay bancos con azulejos que contienen fotografías antiguas de la ciudad .
En primavera es un disfrute para los sentidos pasear por él y contemplar la gran variedad de vegetación de sus jardínes, embriagándose del olor de las glicinias en flor…. Es un lugar muy visitado por los linarenses y utilizado por los niños para jugar».