Con sus nuevos destinos otorgados desde hace meses, los tres franciscanos que durante años han gestionado el Santuario de la Virgen de Linarejos de la ciudad se mantienen al frente del mismo a la espera de que el Obispado de Jaén designe una nueva orden o congregación religiosa que les releve. Las gestiones iniciadas el pasado verano siguen en marcha y, aunque en un principio se señaló el mes de septiembre para dicho cambio en la gestión de la Ermita, desde el Obispado reconocen que se sigue trabajando en el proceso.
«Se mantienen las negociaciones con una congregación religiosa pero, de momento, no hay nada cerrado», señalan fuentes del Obispado jienense que, asimismo, sostienen que la decisión podría «conocerse en breve». Unas negociaciones de las que, de momento, no ha trascendido nada a una de los protagonistas fundamentales del funcionamiento y actividad cotidiana del Santuario de la Virgen de Linarejos, la Cofradía de la patrona, desde donde apuntan que no existe ningún comunicado del obispo sobre las posibles negociaciones.
«No sabemos nada y, por lo tanto, entendemos que no hay ningún acuerdo porque una vez exista una congregación religiosa para gestionar el Santuario, desde la Cofradía tenemos que realizar un trabajo conjunto para el tema de inventario, además de analizar quién será la persona encargada de realizar los cultos», puntualiza el presidente de la Cofradía de la Virgen de Linarejos, Agustín Vázquez, quien señala que, en cualquier caso, existe el compromiso de los tres franciscanos de seguir al frente del templo linarense hasta la llegada de nuevos responsables para su gestión.
Desde Tenerife
Hasta la fecha, y desde que el pasado mes de julio, el obispo Ramón del Hoyo diera a conocer la marcha de los franciscanos de la ciudad minera, sólo ha trascendido la visita de la congregación de ‘Marta y María’, «sin previo aviso» y apenas una semana después de que el obispo diera a conocer su ofrecimiento a dicha congregación de la atención del santuario, para conocer las instalaciones y la actividad que en ella se desarrolla.
La propuesta del obispo persigue que sean las religiosas de dicha congregación las encargadas de gestionar el día a día del santuario en lo que se refiere a mantenimiento y apertura del templo, mientras que el desarrollo de los cultos y oficios quedarían de la mano del párroco de la iglesia del Buen Pastor, y las acciones para el mantenimiento del templo se mantendría en manos de la Cofradía de la Virgen de Linarejos, una vez que los hermanos franciscanos, que venían atendiendo la Ermita desde mediados del siglo XX- abandonen la ciudad ante la escasez de nuevas vocaciones que permita una renovación generacional entre sus miembros.
Junto a la búsqueda de una congregación que atienda diariamente al templo, desde el Obispado se trabajará en las próximas semanas en conocer la situación del Santuario, sus bienes, su comunidad y la Cofradía «para actualizar todos estos datos». Irene Téllez. IDEAL.