El Equipo de Tratamiento Intensivo Comunitario actúa en domicilio o en el ámbito comunitario para abordar el trastorno mental grave
El proyecto tiene como objetivo mantener a los pacientes en su entorno con una calidad de vida aceptable
El Equipo de Tratamiento Intensivo Comunitario (ETIC) del Área de Gestión Sanitaria Norte de Jaén atiende a personas con trastorno mental grave complejo, en el marco del programa que se ha puesto en marcha en cada unidad de gestión clínica de Salud Mental, dentro del proyecto de mejora de la atención a la salud mental en Andalucía.
En concreto, el ETIC de Linares ha realizado hasta julio un total de 643 intervenciones en domicilio o comunidad, atendiendo a 53 pacientes con trastorno mental grave y necesidades especiales, que requieren de atención intensiva en su entorno natural. El principal objetivo es que estos usuarios alcancen una calidad de vida aceptable, desarrollando para ello un sistema de continuidad de cuidados accesible y cercano, así como facilitando la coordinación entre la persona atendida, el medio familiar, los servicios sanitarios y la red de apoyo social.
El ETIC está compuesto por un trabajador social, una monitora ocupacional de la Fundación Andaluza para la Integración Social de Personas con Enfermedad Mental (FAISEM), que trabajan en estrecha coordinación con los facultativos y enfermeras de la Unidad de Salud Mental de Linares en el abordaje de pacientes graves con necesidades complejas.
La mayor sensibilización hacia los problemas de Salud Mental en nuestra sociedad, unida a una disminución del estigma asociado a dicha patología, está favoreciendo una mayor demanda de atención en la Unidad de Salud Mental Comunitaria de Linares en los últimos años. Para hacer frente a esta demanda, se han implantado distintas medidas, como la realización de reuniones frecuentes con los profesionales de Atención Primaria para el abordaje de dichas patologías, realización de protocolos de coordinación conjunta entre atención primaria y atención hospitalaria, la implantación del sistema de teleconsulta, y empleo de herramientas como continuidad asistencial. Estas medidas han permitido una disminución de la demora de primeras consultas procedentes de Atención Primaria, que han permitido obtener una reducción del 44% en la demora y tiempos de respuesta.