Independientemente de si vas por Linares o por cualquier otra ciudad de Andalucía, lo más probable es que haya una o incluso más lavanderías a tu disposición. Este tipo de negocios hoy en día son bastante numerosos en toda España, pero lo cierto es que antaño la situación no era así.
El sector ha ido evolucionando a un ritmo vertiginoso a lo largo de las dos últimas décadas. A continuación analizaremos los diversos cambios que fueron produciéndose, siendo uno de los más importantes el surgimiento de las franquicias de lavandería industrial Clat.
Poco antes de poner fin al anterior milenio empezaron a crecer las empresas de lavandería
No hay que echar la vista demasiado atrás para dar con una época en la que el número de lavanderías en el territorio español era bastante reducido. Sin embargo, la situación empezó a cambiar pocos años antes de dar la bienvenida a los dos mil. En concreto, corría el 1997 cuando en España empezó a crecer una cifra en concreto. Nos referimos a la de empresas que se dedicaban específicamente al ámbito de la lavandería.
En un primer momento estas empresas eran montadas con un claro objetivo: ofrecer sus respectivos servicios a otros negocios que los requerían con bastante regularidad, siendo claros ejemplos tanto las clínicas sanitarias como los hoteles. Tras verse desbordados, no dudaron en externalizar los servicios de lavandería.
Cada nueva lavandería que surgía pasaba a contar con el apoyo directo de una empresa que no tardó en convertirse en referente del sector. Nos referimos a TECNILAV, la cual se encargaba de llevar a cabo varias tareas.
Una de las más importantes consistía en vender la maquinaria que necesitaban en dichas lavanderías, la cual posteriormente era instalada. Adicionalmente también procedían a formar a los profesionales para que supiesen cómo funcionaba cada elemento, pudiendo así prestar un buen servicio en todos los sentidos.
En muy poco tiempo dicho mercado evolucionó, haciéndose necesaria más especialización que, afortunadamente, tuvo lugar en muy poco tiempo. En concreto fue en el año 2002.
El surgimiento de CLAT
TECNILAV no dudó en hacer todos los esfuerzos oportunos para realizar esa especialización que tanto requería el sector. Cinco años después de haberse iniciado el auge de las lavanderías en el país ibérico fue creado CLAT, abriéndose la que a nivel histórico está considerada como la primera lavandería de tipo industrial.
Concretamente en su momento contaba con una equipación realmente buena. Miele Professional era la marca en la que se confiaba para la fabricación de la maquinaria, la cual cuenta actualmente con más de un siglo de experiencia.
CLAT evolucionó convirtiéndose en una especie de centro piloto que también impartía una buena formación, enseñando a los interesados a aplicar el SYSTEM CLAT que estaba cosechando excelentes resultados.
Los clientes finales proporcionaban un muy buen feedback, el cual acababa llegando a CLAT, cuyo éxito cada vez iba a más. Los usuarios requerían servicios de lavandería que fuesen sinónimos de calidad y al fin contaban con una empresa que se los proporcionaba.
El boca a boca dio pie a que estos servicios fuesen solicitados por un cliente final ubicado en Linares, otro en Galicia, varios en Cataluña, etcétera. Por ende, se hacía necesaria una globalización que abarcase el cien por cien de España. Finalmente llegó el momento: se abrieron las franquicias de lavandería industrial. CLAT fue la encargada de hacerlo.
Los buenos resultados que obtenía hace diecisiete años han sido mejorados si cabe. ¿Cómo es posible? Básicamente ello es fruto de las características en las que profundizaremos en próximas líneas.
Un sistema de trabajo que proporciona múltiples ventajas
No es de extrañar que las franquicias de lavandería industrial hayan proliferado tanto en España. Y es que el sistema de trabajo conocido bajo el nombre de SYSTEM CLAT proporciona una serie de beneficios de los que muchos negocios pasan a disfrutar. Uno de los más importantes se resume en la calidad.
Desde hace años los estándares de calidad se mantienen en unos niveles muy altos, factor que ha sido fruto de haber sabido innovar en un mercado que, antiguamente, era demasiado tradicional.
Conforme va evolucionando dicho mercado también lo hace SYSTEM CLAT, adaptándose así a un sector que tiene una gran demanda. Lo demuestran a la perfección los numerosos clientes con los que cuenta en el ámbito de las empresas alimenticias.
El sistema de trabajo de las franquicias de lavandería industrial que hay en España es eficiente a más no poder y abarca un gran volumen de trabajo. Todo ello se traduce en que cada franquicia pase a proporcionar una buena rentabilidad.
Poco a poco la demanda va creciendo al mismo tiempo en que lo hace el éxito de dichas franquicias. Es por este motivo que, de manera paulatina, ha ido aumentando el número de franquicias de lavandería industrial repartidas por todo el territorio nacional.