- El laboratorio estaba dividido en catorce pisos donde se cultivaban, cosechaban, elaboraban y preparaban para su distribución sustancias estupefacientes; concretamente plantas de marihuana
- La Operación Torre se ha saldado con la detención de seis personas: una mujer y cuatro hombres, la incautación de 1.163 plantas de marihuana, seis gramos de hachís, un arma de fuego que fue sustraída en el año 2013, básculas, aparatos de aire acondicionado, lámparas, fertilizantes, conducciones de agua, dosificadores, armas blancas potencialmente peligrosas, 300 euros en metálico y diferentes material eléctrico
Agentes de la Policía Nacional adscritos al Grupo de Estupefacientes de la Brigada de Policía Judicial de Linares, agentes de la Comisaría de Andújar y de la Unidad de Intervención Policial han desmantelado un laboratorio clandestino de cultivo y elaboración de sustancias estupefacientes distribuido en 14 pisos de la barriada de Arrayanes de la ciudad. La Operación “Torre” se ha saldado con la detención de seis personas: una mujer y cinco hombres, la incautación de 1.163 plantas de marihuana, seis gramos de hachís, un arma de fuego que fue sustraída en el año 2013, básculas, aparatos de aire acondicionado, lámparas, fertilizantes, conducciones de agua, dosificadores, armas blancas potencialmente peligrosas, 300 euros en metálico y diferentes material eléctrico.
Los investigadores del Grupo de Estupefacientes de Linares habían recabado diferentes informaciones anónimas relacionadas con el tráfico de drogas sobre la existencia de un edificio de nueve plantas con 36 viviendas que estaba ubicado en la barriada linarense de Arrayanes. En este bloque, supuestamente existía un elevado número de viviendas que estaban siendo utilizadas para el cultivo intensivo de marihuana.
Pisos abandonados ocupados por el grupo delincuencial
Varias de las viviendas, presuntamente, estaban siendo utilizadas como puntos de venta, provocando un continuo trasiego de toxicómanos que acudían a proveerse de estupefacientes, pernoctando, muchos de ellos, en las zonas comunes del edificio donde se abandonaban los útiles de consumo. La mencionada situación había provocado que, cada vez más vecinos residentes en la torre con hijos menores, optaran por el abandono de sus viviendas, siendo rápidamente ocupadas por los miembros del grupo criminal que los habilitaban como cultivos de marihuana.
Vigilancias inspecciones y comprobaciones
Los investigadores con las informaciones recibidos sometieron la zona a una estrecha vigilancia, realizando diferentes inspecciones y comprobaciones en las que, no solo se comprobó la veracidad de las informaciones, también que los pisos vigilados se suministraban de fluido eléctrico de forma ilegal, anómala y peligrosa al poner en serio riesgo la integridad de los pocos vecinos ajenos al grupo criminal. Concluyendo que el consumo de las viviendas superaba la de toda una zona industrial.
Una vez que los investigadores concluyeron la primera fase de la investigación, procedieron al registro judicial de las 14 viviendas controladas en las cuales estaban distribuidas 1.163 plantas de marihuana que crecían en diferentes laboratorios dotados de todo tipo de material my utensilios destinados al cultivo, elaboración, preparación y distribución de la droga intervenida.
La Operación “Torre” se ha saldado con la detención de seis personas: una mujer y cinco hombres a los que se les imputa la presunta comisión de delitos contra la salud pública, defraudación de fluido eléctrico, receptación y tenencia ilícita de armas, la incautación de 1.163 plantas de marihuana, seis gramos de hachís, un arma de fuego que fue sustraída en el año 2013, básculas, aparatos de aire acondicionado, lámparas, fertilizantes, conducciones de agua, dosificadores, armas blancas potencialmente peligrosas, 300 euros en metálico y diferentes material eléctrico.
Las investigaciones no están concluidas y no se descartan nuevas detenciones.
