Curro Díaz afrontó la «encerrona» en el aniversario del fallecimiento de Manolete
En la pasada Feria de San Agustín de Linares había previstos dos festejos taurinos. El del día 28 de agosto, concretamente, lo protagonizarían Morante de la Puebla, José María Manzanares y Curro Díaz. Una serie de diferencias hicieron que ninguno de los dos primeros toreara en el festejo, con una polémica que no quedó indiferente. Fue el linarense Curro Díaz el que se ofreció a torear todas las reses de la tarde para salvar el festejo, por lo cual se le ha otorgado una mención especial desde el Ayuntamiento de Linares.
El problema tuvo que ver con los toros del festejo, que eran de Álvaro Núñez. Uno de ellos fue rechazado por el veterinario, pero si era del gusto de la cuadrilla de Morante. No obstante, el equipo veterinario se reafirmó en su negativa, lo que hizo que no quisieran torear ni Morante de la Puebla ni José María Manzanares.
Desde la empresa Reyma Taurino quisieron poner solución admitiendo al toro en cuestión, pero ambos toreros presentaron partes médicos para no acudir al festejo y se marcharon de la ciudad.
Según ha indicado «El Correo de Andalucía», la Junta de Andalucía ha sancionado a ambos toreros con 12.000 euros a cada uno por una «infracción grave» según el reglamento taurino, por «inasistencia injustificada» unas horas antes del festejo. La Junta abrió expediente ese mismo día y ahora se ha conocido la resolución. Tendrán 15 días para presentar alegaciones y recurrir la sanción. En caso de admitir la multa, se podrán acoger a una reducción del 40% si reconocen su responsabilidad.