Las ventas cada vez van un poquito mejor, y la verdad es que el año, en líneas generales y a pesar de la situación de paro que atraviesa la ciudad, sin industria ni trabajo, ha ido bien”, explica uno de los comerciantes justo cuando se cumple un año desde que se unificaran, de forma oficial, los puestos del mercado de abastos tras la remodelación del representativo edificio modernista de la calle Santiago. Y ese es el sentir general de los que en las instalaciones ofrecen sus productos frescos de manera tradicional.
Para propiciar el cambio, en el edificio se acometieron diferentes intervenciones para adecuarlo a la normativa vigente y mejorar su accesibilidad. Así, se creó un espacio de carga y descarga y se procedió a la mejora de la señalización circulatoria para facilitar el acceso de los clientes. En total, son más de cuarenta puestos los que se ubican en el edificio, destinados a la venta de verduras, frutas, carnes y pescado en unas instalaciones del siglo XIX, y que además muestra elementos de forja del antiguo teatro Olympia o una obra de Miguel Ángel Belinchón.
En este tiempo, indican los comerciantes, se cometieron mejoras en cuanto al mantenimiento del mercado. “Estamos esperando que abran los nuevos puestos de otras actividades comerciales que complementen a las que hay en la actualidad, para así atraer más público”, aseguran. Concretan que son doce los que se encuentran aún cerrados, y según explicó recientemente a este periódico el concejal de Salud y Consumo, Daniel Campos, el trabajo en el proceso de adjudicación no cesa, con la intención de que en breve la ocupación del inmueble sea total.
La intención de los comerciantes, mientras tanto, es la de continuar con la promoción de la plaza. Y aunque en un principio se plantearon crear una asociación, a través de la que organizar diferentes actividades aparte de las que haga el Consistorio, como degustaciones, ofertas y demás, la intención es esperar a que lleguen los nuevos “inquilinos” del mercado de abastos. Lo que sí mantienen en pie es la posibilidad de abrir algunas tardes de la semana, que previsiblemente realicen ya con la llegada del buen tiempo. “En definitiva, seguir trabajando para intentar no solo que el Mercado de Abastos no se pierda, sino que también esté lleno como ha estado siempre, que la gente consuma nuestros productos frescos y a buenos precios, a granel y que sea un atractivo más a la hora de comprar en la ciudad”, afirma el comerciante.
Por otra parte, desde el Ayuntamiento también se trabaja, además, en el proyecto para dar un nuevo uso al edificio del antiguo mercado de frutas y verduras, cuya demolición comenzó poco después del traslado. En ese sentido, el Consistorio retomará la opción de organizar un concurso de ideas para recibir posibles planteamientos que sean viables en su ejecución. Mariela Soriano. JAEN.
