Aunque era un cambio al que se aspiraba desde hace más de una década, siempre queda el ‘pellizco’ de despedirse del edificio que ha sido durante casi un siglo el centro de los profesores, personal administrativo y estudiantes de ingeniería en la ciudad de Linares. Los edificios que desde mediados del pasado siglo albergaban la Escuela Politécnica Superior de Linares (EPS) echaban ayer el cierre tras el traslado de todos los servicios a las nuevas instalaciones del Campus, siendo el servicio de secretaría el último en cambiar su ubicación.
Por ello, de cara a tener una última foto para el recuerdo de la que ha sido la EPS hasta ahora, ayer se dieron cita en el edificio principal el profesorado, personal administrativo y de investigación, junto con los alumnos, como despedida de unos inmuebles sobre los que aún no existe un proyecto claro de futuro.
«Llevábamos mucho tiempo luchando por tener unas instalaciones adaptadas a los nuevos tiempos y estamos satisfechos del nuevo Campus, pero si es un momento algo sentimental el cierre de estos edificios», reconocía Sebastián García Galán, en la jornada de ayer, a la vez que reconocía que de momento se desconoce un proyecto definitivo para unos inmuebles propiedad de la Universidad de Jaén (UJA), si bien reconoció su deseo «que parte del uso que se le pueda dar sea una residencia de estudiantes, muy positiva para consolidar nuestros estudios». En este sentido, el rector de la UJA, Juan Gómez Ortega, reconocía en una de sus visitas a Linares el pasado verano que «existen diferentes posibilidades, pero no hay ningún proyecto concreto», si bien mostró su intención de garantizar un uso «para estos edificios que esté relacionado con la formación, la cultura u otras cuestiones sociales». De este modo, son varios los colectivos que han centrado sus miradas en los emblemáticos edificios de la EPS, ubicados en el centro de la ciudad, para poder compartir el espacio que desde hoy se encuentra sin actividad docente y administrativa.
Una residencia universitaria, centrar la actividad social de la UJA en Linares en sus instalaciones, y generar un espacio social son las ideas que más votos ganan dentro de la comunidad universitaria; pero a ellas también se suma la petición de centros educativos, como el IES Santa Engracia y la Escuela Oficial de Idiomas, para aprovechar las instalaciones, en particular el edificio de minas, para acoger su actividad.
Un mes en el Campus
El acto de despedida del que ha sido su sede desde mediados del sigloXX también sirvió de marco para realizar un balance del primer mes en funcionamiento del Campus Científico-Tecnológico de Linares.
Así, desde que empezara el nuevo curso universitario el pasado 7 de septiembre, la UJA ha puesto a disposición los primeros laboratorios de prácticas que, si bien no están aún al 100% «en breve espacio de tiempo se contarán con todas las instalaciones para docencia».
«La repercusión en la docencia del traslado es prácticamente inexistente porque todo se está desarrollando en tiempo», destacó García Galán, quien apuntó que más allá de las nuevas instalaciones, se trabaja en la ampliación de la oferta formativa a través de máster, para lo que se trabaja de forma coordinada con la Universidad de Córdoba (UCO) y Huelva (UHU) para el Máster en ingeniería de Minas. Irene Téllez. IDEAL.
