La tensión se “mascaba” en el último pleno del año. Tan solo dos puntos en el orden del día para una sesión extraordinaria celebrada fuera del horario habitual y en la sala de comisiones del Ayuntamiento. En concreto, ambos estaban vinculados a un reconocimiento extrajudicial de crédito —a través del que hacer frente a facturas de ejercicios ya cerrados—. “Gran parte de ese reconocimiento, que en total suma un importe de 1,6 millones de euros, viene por algunas de las partidas de Linaqua con la piscina cubierta, del déficit de ejercicios anteriores. Si bien es cierto que estaba fijado en el presupuesto anual ese importe en cada uno de los ejercicios previstos, no se tramitaron por parte de los departamentos las facturas pertinentes, con lo que no se pudo hacer frente a ellas”, explicó el concejal de Hacienda, Luis Moya.
También es necesario para hacer frente a la indemnización por el despido de tres trabajadores que, concretó, se produjeron al principio de que Linaqua se hiciera con la gestión de la empresa mixta. “Dos de ellos pertenecían a una empresa que le trabajaba al Ayuntamiento para el mantenimiento, pero cuando Linaqua se hace cargo ya no necesita de sus servicios, y ahí comenzó un litigio en los juzgados”, defendió.
A través de ese punto también se procederá a algún pago por expropiación, y la devolución de una subvención de más de 170.000 euros a la Junta de Andalucía. “La hemos estado peleando. Hace unos años se hizo un concurso para contratar una empresa que hiciera la innovación del PGOU. Cuando la contratamos, la Junta de Andalucía sacó unas subvenciones para eso, pero ya no podíamos renunciar a ese contrato que estaba vivo y la administración nos decía que el contrato debía llegar tras recibir la subvención”, manifestó el concejal linarense.
Fueron dos puntos en el orden del día que contaron con el apoyo de Ciudadanos y Cilus, pero con el voto en contra de IU y el PP. En el primer caso, según explicó su portavoz, Sebastián Martínez, por las dos cuestiones relacionadas con la piscina. “Estamos cansados de esta falta de transparencia”, recriminó. En el segundo, además de que coincidieron con IU en la situación de Linaqua, la edil Ángela Hidalgo también apuntó al reintegro de la subvención a la Junta de Andalucía. Mariela Soriano. JAEN.
NEGOCIACIONES. No es este el único asunto económico que genera discrepancias entre los partidos. “En el pleno ya se ha dejado sentir cierta tensión por parte de los grupos políticos. Intentaremos sacar un presupuesto con el mayor consenso posible, aunque mucho me temo que va a ser difícil tras los encuentros mantenidos con algún grupo”, argumentó el edil.
